Estrella de cardo, que vuelas jugando en los vientos de abril, Al verme tan triste llegaste a mi vera, suspensa en el aire por vértices mil; ni sigues ni bajas ni te alzas en vuelo; mantienes tus hebras de plata de frente a mi faz; y yo ya comprendo que un soplo de niño dio impulso a tus alas y alzó tu volar; susurro al oído; mensaje sencillo; tú traes un beso, del hijo lejano, al padre contrito de tanto pesar, y un beso tan tierno, tan cálido y simple, produce el milagro, cual luz celestial; y yo te contemplo, con amplia sonrisa, estrella de cardo; efluvio encantado; mensaje filial; grandeza en lo simple; pureza sublime.